Si su vehículo ha sufrido un golpe grave, es de extrema importancia reparar las partes dañadas para no causar más perjuicio a la estructura interna del vehículo. Las partes desplazadas deben colocarse en su sitio de nuevo y la chapa debe colocarse de nuevo para recuperar la efectividad de nuestra “armadura”.
Si el golpe ha sido leve, como pequeñas abolladuras, es conveniente arreglar esas partes ya que puede medrar la efectividad de la chapa del coche a largo plazo. Además, esas abolladuras y pequeñas grietas provocan oxidación y que el material se estropee con el paso del tiempo.
La pintura es, además de ser el elemento que aporta la estética al vehículo, el agente protector de la chapa. Gracias a la pintura, la chapa se mantiene en buen estado.
Confíe sólo en profesionales cualificados, donde la experiencia es un factor fundamental para obtener excelentes resultados. En Autos Reparaciones Guadalhoce, su vehículo siempre lucirá como nuevo.